La entrada de hoy nada tiene que ver con cerveza, salvo la tienda y algún detalle lejano. Es que necesito explicarlo, porque no me lo creo todavía:
Esta tarde han entrado unos chavales con pintillas de marranetes, y como no es mi trabajo juzgarles, les he ido a atender. Cuando estaba intentando hablar con uno de ellos sobre la monería de perrete que llevaba, han entrado dos señores que han resultado ser dos Guardia Urbanos de "secreta". Se los han llevado fuera y los han cacheado ante mi mirada perpleja, puesto que no me lo esperaba, la verdad.
Al poco uno de ellos me ha entrado de nuevo para decirme "Yo la multa la puedo recurrir". Con lo que he contestado "Felicidades. A mí me da lo mismo. Ahí no me meto". El chaval por lo visto tiene ya reaños, porque sabía que no los pueden "interceptar" en un local/negocio. Solo lo pueden hacer en la calle, y por eso, ha sido "ilegal". Cómo lo sabe, no lo se, pero me lo imagino.

En fin. Que no me he asustado, porque siempre llevo un lápiz afilado encima, que es más peligroso que una plumilla de abrir cajas, y porque esta tarde ya he ido al baño, que si no a lo mejor hasta me pongo imaginativo.
Sed felices, y si vais a delinquir, por favor, no intentéis resguardaros en la tienda, que ya he tenido bastante por hoy.
Eric ens passaràn molts episodis surrealistes a la botiga xD podrem fer un llibre fins i tot! Pasapalabra! Haurem de fer un telefono rojo i botón antipanico jaja i sino la tecnica Palace "me trago la llave eeehhh" jaja bona nit i no hi donis més voltes.
ResponderEliminar